1 ene 2008
2008
La luz del primer día del 2008 parece limpia; los 17 árboles que veo desde mi ventana están callados como si se confabularan para hacerme creer que todo comienza. Ese es uno de los pocos sentimientos que conservo de infancia cuando inicia el año. Lo agradezco a la vida: la ilusión del comienzo.
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2 comentarios:
No tengo idea porquè, pero respirè ese aire con esta lectura. Un gran abrazo, de los fuertes.
jejeje...tienes la vdd es tu escrito cada comienzo es una ilusion..hermosaa!!!
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